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    'Juego de Tronos': los momentos por los que Cersei mereció subir al Trono de Hierro

    Aunque sea un personaje digno de odiar, no podemos negar que nos ha dejado grandes momentos para aplaudir.

    Por afrontar con "dignidad" el paseo de la vergüenza

    Cersei se sometió a uno de los peores castigos: el paseo de la vergüenza. A pesar de que el pueblo llano la escupía, la tiraba cosas, y la insultaba, y de tener que caminar desnuda en contra de su voluntad, la reina superó el reto de una forma más digna de lo que muchos hubieran podido soportar.

    La tortura a Septa Unella

    Cersei se cobró su venganza contra aquella que había intentado arrebatarla su dignidad. Septa Unella, miembro del culto de la Fe de los Siete, fue víctima de la tortura de Cersei. Sabemos que no se trata de un acto ético, pero no podemos negar que -tratándose de ficción-, todos aplaudimos la decisión de la Lannister.

    El enfrentamiento con Lancel

    HBO

    Nadie se interpone entre Cersei y sus hijos. Eso nos queda claro. Por eso, cuando Lancel vino en busca de Joffrey para que continuara librando la peligrosa 'Batalla de Aguasnegras', Cersei se negó rotundamente. No estaba dispuesta a dejar que su hijo se sometiera al peligro que se le exigía, así que terminó enfrentándose a Lancel y demostrando quién mandaba allí.

    La escena del fuego Valyrio

    Cersei orquestó un gran atentado con fuego Valyrio donde eliminó a buena parte de sus enemigo. Sabemos que, efectivamente, no es un acto por el que debería ganarse un hueco en el trono, pero debemos admitir que fue un 'momentazo'.

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