Un hombre mayor tiene dos hijos llamados Monty y Ted que no se soportan, algo que siempre le ha apenado. En su lecho de muerte expresa una última voluntad: decreta que el hijo al que ha elegido como único heredero habrá de convivir con su odiado hermano durante seis largos meses. De lo contrario, no recibirá la herencia. El padre trata de este ...