Entretenida comedia que supera a las dos precuelas anteriores. A destacar las apariciones de Hugh Grant y de Emma Thompson, coincidente con los momentos más graciosos de la película. Es cierto que no es ninguna obra maestra, pero verla tampoco supone una pérdida de tiempo y dinero.
Muy buena comedia, te ríes mucho y lloras. Muy nostálgica también. Pensé que sería un pastelón, y me equivoqué, si te gusta la comedia romántica, tienes que verla