La película fue seleccionada para representar a México en los Premios Oscar y en los Premios Goya.
La historia está inspirada parcialmente en vivencias familiares y recuerdos de la madre del director sobre la muerte de su tío.
La película es el primer largometraje de Pierre Saint‑Martin Castellanos.
La cinta se estrenó en el Festival Internacional de Cine de Guadalajara 2024, donde ganó el Premio Mezcal a Mejor Película Mexicana y el Premio del Público.