En 2004, el fotógrafo Mikel Aristregi viaja a Camboya para documentar la dura realidad de los niños y niñas de la calle. Allí conoce a Pich, un niño de 11 años atrapado en la adicción al pegamento y la metanfetamina.
Nueve años después, en 2013, Aristregi regresa a Phnom Penh con la esperanza de reencontrarse con Pich y descubrir qué ha sido de su vida. Un viaje íntimo y conmovedor que explora la memoria, la pérdida y el impacto del tiempo en los destinos marcados por la marginalidad.