El documental narra el caso del oso Cachou, hallado muerto en abril de 2020 en el Valle de Arán, cuyo envenenamiento conmocionó a la sociedad. A través de investigaciones policiales, intervenciones telefónicas y análisis forenses, se reconstruye la compleja investigación que determinó que la causa de su muerte estuvo ligada a un producto similar a anticongelante de coches.
La historia lleva a dos encausados, un exconsejero del Consejo General y un agente de Medio Natural, al banquillo, mostrando la lucha por la justicia y la protección de la fauna.