Tan sólo hicieron falta 28 días entre Nueva York y Puerto Rico para el rodaje completo de la película. Parece que el director se dio prisa en grabar lo que sería su opera prima.
Solo hicieron falta dos semanas, después de haber finalizado el rodaje, para que Universal Studios, la distribuidora, asistiera a un pase privado de la película. No solo se dieron prisa en rodarla, sino también en montarla.
Obra debut para el director Franc Reyes, que consigue dar un nuevo estilo a uno de los géneros más clásicos.