La mujer rubia

Este inteligente filme de Lucrecia Martel se construye a partir de una premisa muy simple: una mujer tiene un accidente mientras conduce por una carretera solitaria. En lugar de salir del coche para comprobar las consecuencias, sigue adelante. Con un guión extremadamente calculado y pensado hasta el último detalle, Martel pone en escena el filme desde la perspectiva subjetiva de su protagonista. La directora obliga al espectador a indagar en la psicología de ella proyectando sus propias emociones sobre los actos que tienen lugar en el filme. Cada una de las tres partes en las que se divide la película da un vuelco a la interpretación de los acontecimientos. El filme comienza lidiando con la idea del shock, del trauma, del miedo y de la culpabilidad en una esfera puramente subjetiva que, sin embargo, terminará alcanzando una dimensión social. A favor: La férrea estructura de ficción sobre