La puerta de las siete cerraduras

En la estación londinense de Waterloo un hombre muere sin causa aparente, y un desconocido intenta sin éxito apoderarse de la llave que el fallecido lleva en el cuello. Con él, son ya dos cadáveres en los que se han encontrado una llave similar, lo que lleva al inspector Martin a sospechar un nexo común. Sus investigaciones le llevan al despacho del abogado Haveloc, albacea de la familia Selford, quien le cuenta que el anciano Selford, repartió siete llaves entre amigos de confianza, con el encargo en que el día en que su hijo y heredero llegue a la mayoría de edad, deben reunirse y abrir con las siete llaves una puerta tras la cual se encuentra la herencia. Más tarde el inspector escucha un extraño relato de labios de un hombre aterrorizado: se trata de un experto ladrón de cajas fuertes, que le informa que le han secuestrado y llevado a un lugar desconocido con el propósito de que abriera una puerta con siete cerraduras.