Crítica de SensaCine.com para Soy el número cuatro: Crepusculines alienígenas

El espíritu adolescente comienza a inundarlo todo después del triunfo de la saga Crepúsculo. Toda una serie de bestseller juveniles arrasan las carteleras en busca de seguir arañando un público en principio entregado a un tipo de fantasía muy descafeinada gracias a la que pueden establecer lazos emocionales con sus héroes del momento.

'Soy el número cuatro' se basa en una novela del mismo título e intenta llevar a cabo la misma estrategia de mezclar elementos del cine de terror y ciencia ficción pero desde una perspectiva prepúber. D.J. Caruso orquesta una película a la que puede sacar escaso partido debido a la inconsistencia del guion. Tampoco ayudan a mejorar el espectáculo el escaso carisma de los tres actores protagonistas.

La película intenta moverse a ritmo de atronadora banda sonora para estimular en modo machaque auditivo lo que las insulsas imágenes no son capaces de despertar, pero ningún efectismo es suficiente para que la película salga adelante.

A favor: Cuando parece que todo está perdido, los últimos minutos parecen levantar un poco el ánimo.

En contra: Un proyecto definitivamente insulso y fallido.