Capricciosa

Henrik (Linus Nilsson), un joven de 17 años de edad, vive con sus padres y junto a sus dos hermanos pequeños, Oliver (Matias Bergsten) y Johanne (Moraea Myrgren-Johansson), en una acogedora ciudad del sur de Suecia, Mälmo. Como la mayoría de los adolescentes, Henrik acude diariamente a la escuela, aunque pone especial atención al hecho de ser un buen deportista, dejando de lado, a veces, esas obligaciones que, socialmente, se imponen de forma tan categórica que asustan. De esta manera, el joven sueco pasa sus días jugando a la pelota, ya que tan sólo piensa en la idea de que algún día se convertirá en una estrella mundial del fútbol. Sin embargo, tanto su presente como sus perspectivas de futuro se ven truncadas cuando asalta a la vida de Henrik la muerte de su madre, sumiendo al padre en una terrible depresión con su consecuente caiga en el alcohol. Así, Henrik queda irremediablemente al cuidado de sus hermanos pequeños, dejando de lado su deseo de ser alguien en el mundo futbolístico para no desatender lo más importante: su familia.