Mi cuenta
    West Side Story
    Nota media
    4,0
    106 notas
    ¿Tu opinión sobre West Side Story ?

    12 Críticas del usuario

    5
    1 crítica
    4
    6 críticas
    3
    5 críticas
    2
    0 crítica
    1
    0 crítica
    0
    0 crítica
    Ordenar por
    Mejores críticas Últimas críticas Usuarios que han publicado más críticas Usuarios con más seguidores
    BeniDolç Villaescusa
    BeniDolç Villaescusa

    100 usuarios 137 críticas Sigue sus publicaciones

    3,5
    Publicada el 25 de febrero de 2022
    Película usa del 2021, de una duración de 156 minutos, con una valoración de 6/10, bajo dirección de Steven Spielberg y guión de Tony Kushner, con un presupuesto de 100 millones, adapracion musica de Leonard Berstein y libro de Arthurt Laurent,

    Resulta inevitable retroceder a los orígenes revolucionarios de la obra original estrenada en los escenarios del pabellon Winter Garden de Nueva York en 1957. Tanto el musical homónimo de Broadway, como su primera adaptación al cine en 1961 de Roberto Wise, supusieron sendos puntos de inflexión en el histórico de los musicales en su manera de asumir la tragedia por encima de los grandes espectáculos optimistas y desenfadados del momento.
    La adaptación original de Arthur Laurents, basada en el legendario Romeo y Julieta de Shakespeare de 1597, manejaba con perspicacia temas relativos a los asuntos raciales y la inmigración en un EEUU en los 50/60.
    La versión contemporánea que nos ofrece Spielberg llega con la decisión ante la melancolía del cine del pasado, en el justo lugar de un autor consumido por la tragedia de unas imágenes irremediablemente fugaces, intangibles, sumidas en la desesperanza.

    Spielberg entiende que aborda un lugar atemporal, anclado, que debe reconstruirse una y otra vez entre las ruinas del tiempo. Una metrópolis en constante construcción, y arranca en travelling sobrevolando los escombros de unos edificios en demolición. La cámara se pasea por las ruinas y por el polvo de un lugar vaporoso, tejido sobrenatural, de contornos invisibles.
    Entradas y salidas a lugares de fantasía sin dejar de pisar una y otra vez las ruinas de nuestro mundo. Fragmentos de un cine del pasado empalmados fotograma a fotograma en un montaje en continua lucha contra el paso del tiempo. Queriendo mostrar que es parte de una batalla por la supervivencia del cine. El último de los suspiros por sobrevivir. Utiliza la forma construyendo un lenguaje visual deslumbrante que no puede ni quiere esconder la oscuridad de su mirada.

    Sin duda estamos ante un elaborado ejercicio de memoria e identidad fílmica, algo a lo que el director nos tiene acostumbrados.
    Un charco puede convertirse en océano cuando la memoria pisoteada realza la eterna melancolía de quien no rinde cuentas a nadie. Solo el cine importa. Sus discursos de la memoria no tendrían sentido sin esa unión religiosa que todo esto guarda con respecto a la muerte. La política de su universo domina con mano de hierro las ilustraciones de una muerte que se abisma al borde del plano.
    Todo conduce hasta la imagen de las ruinas de un Manhattan no muy distinto en forma y espacio de cualquiera de esos purgatorios. West Side Story aborda la muerte, sus actores deambulan por las estancias de un escenario gigantesco en el que las paredes y techos impiden ver el cielo o las estrellas.

    Spielberg apela a un bosque de imágenes en tonos ocres para pintar murales verticales, murales de una América en entredicho. Una oda fúnebre a la memoria de los grandes musicales del cine clásico que, incluso en un año inusualmente prolífico en el género, no deja de estar enterrado para el gran público. Guarda correspondencias, preciosas misivas, con los añorados tintes del tecnicolor en las hermosas cintas de Vincente Minnelli o George Sidney, pero con el debido cuestionamiento de las fórmulas del pasado. Deberíamos evitar hipérboles que deroguen o anulen el sentido mismo de un filme rompedor, que no pretende caer en la complacencia del espectáculo abracadabra. Es en la naturaleza de su dolor, de su melancolía o aflicción, donde apreciamos su deconstrucción, una hábil puesta a punto de la codificación en imágenes del gran relato americano. Por eso Spielberg enciende la llama del paroxismo dando luz a escenas prodigiosas. Como la entrada al gimnasio en donde se celebra el baile anual rodada en plano secuencia. El primer encuentro entre Tony (Ansel Elgort) y María (Rachel Zegler), miradas cruzadas en medio del vertiginoso baile y que su director prefiere inducir a la intimidad de la trastienda.

    Los enamorados son dos siluetas aisladas de cualquier contacto con lo que les rodea. El rayo de luz que perfora y envuelve un porcentaje muy alto de la filmografía Spielberg.

    También existe un cambio secuencial en el orden de las canciones en la comparativa, estéril pero inevitable, con respecto la versión del 61, y un mejor sentido narrativo. Resaltar el trueque de roles del número Cool, con cambios en la acción muy sugerentes. Subrayar los matices del personaje de Tony, cuyo conducto emocional está expuesto bajo la demanda de esa dualidad de hombre/niño, villano/santo, a raíz de su pasado en prisión y ese proceso de redención que se va creando en torno a su figura mesiánica. Hacemos hincapié en esta composición de niño perdido, en su complicada integración en la sociedad, en el peso de su orfandad, otra de las bases catedralicias del cine Spielberg, o de su ambiguo papel de líder. Perspicaz, a un lado, pero con mayor peso que en la versión de Wise, asoma un Riff (Mike Faist), mucho más triste, el niño perdido al que le faltan referentes y estrellas a las que agarrarse. O la sencilla, bonita imagen, de Tony y Chino levantando juntos la persiana de la fábrica de sal. El destino adopta formas caprichosas. Esa dualidad se convierte en trinidad cuando el filme sucumbe al sortilegio de lo sobrenatural, en ese lado luminoso, místico que proyectan sus imágenes.

    El torbellino de emociones a las que nos enfrenta la elegante realización de Spielberg está sujeto a una sabiduría actualmente fuera de toda duda, plenamente consumada, en donde la adecuación entre contenido y forma susurra, acaricia al espectador entregado a los brazos de un demiurgo poderoso. Lejos de ser una reiteración o una película arrasada por la inercia de la herencia, troca en un ejercicio reconocible a los discursos del cineasta. Muchas de sus partes forman un todo genérico en perplejas resonancias con su cine. El halo fantasmagórico venido del espacio exterior en esas sombras alargadas que ocupan toda la pantalla; la efigie de un estado vampírico, ese Lincoln sumergiéndose en la oscuridad de su hogar. Spielberg abre y cierra el círculo de la melancolía del presente. Esas ruinas que abren y cierran son panorámicas de duelo, de luto por el tiempo perdido que se resiste a desaparecer. El progreso, animal salvaje, caníbal, no deja nada a su paso estableciendo contrastes entre lo viejo y lo nuevo. Distopía y ocaso del sueño americano. La bola gigante devora y aplasta todo lo que a su paso encuentra.

    Pero no olvidemos que la película que nos ocupa es un musical y en esos registros el resultado es de sobresaliente. Los arreglos de David Newman y la dirección de Gustavo Dudamel amplifican y alzan la voz a las músicas y letras originales de Leonard Bernstein y Stephen Sondheim, probablemente una de las mejores y más perfectas partituras de la historia. El sentido del ritmo, la planificación, los cortes y elaboradas transiciones producen una elegiaca armonía donde todo late con intenso arrebato sentimental. Menciones aparte para la escritura de Tony Kushner, en un guion inteligente, que sabe adaptarse a las necesidades del presente limando las asperezas de adaptaciones previas. Mención especial para las dos Anitas, Rita Moreno, anclaje e ilusión que Spielberg emplea para destapar multiversos, las baldosas amarillas que iluminan y señalan el camino a casa. Un Somewhere distinto, atrevido, de aires mágicos, de bola de cristal o médium. Y la nueva Anita, una Ariana DeBose dejándose la piel en el papel, por lo que opta a premio.
    Raúl C
    Raúl C

    36.844 usuarios 544 críticas Sigue sus publicaciones

    4,0
    Publicada el 4 de enero de 2022
    West Side Story (2021).

    “La vida importa incluso más que el amor.”
    ¡Quién mejor que Steven Spielberg para dirigir uno de los más grandes musicales de Broadway del pasado siglo llevado a la gran pantalla 60 años después de que la música de Leonard Berntein resonara por los cines de todo el mundo!

    “Tony, eres una leyenda del West Side”.
    El responsable de “E.T.” y de “Salvar al Soldado Ryan” nos hace testigos de uno de los mejores musicales cinematográficos de todos los tiempos, introduciéndonos en la renovada historia de Romeo y Julieta que protagonizaron los personajes de Tony -aquí con los rasgos de Ansel Elgort, joven protagonista de “Baby Driver”- y María, interpretada por una bellísima soprano desconocida para el gran público europeo que aquí sustituye a la malograda Natalie Wood (que falleció veinte años después de estrenar la versión de 1961).

    “Cuando el amor es tan fuerte, no existe el bien o el mal.”
    El reparto lo componen un buen número de artistas del baile y la canción que aunque en conjunto son poco conocidos, poseen una excelente calidad, comenzando con el citado Elgort -actor, cantante y Dj- . Por su parte, Rita Moreno, la Anita de la película original, encarna aquí a Valentina, la protectora puertorriqueña de Tony, que también hace las veces de productora ejecutiva en la cinta que nos ocupa.

    Steven Spielberg ha vuelto a hacerlo.
    Aun constando de un metraje superior a los 150 minutos, la última superproducción de Spielberg, que ha necesitado la mano de obra de más de 15000 profesionales, no se hace larga en absoluto, disfrutándose cada número musical, cada baile y cada canción. Y es que el diseño de producción y la ambientación del Nueva York de los años 50, la increíble fotografía, las magníficas coreografías, la bonita historia de amor de los protagonistas y desde luego, la banda sonora de Bernstein hacen que nos encontremos ante una verdadera obra maestra del 7º Arte premiada y nominada ya múltiples veces tras su reciente estreno. Esperemos a ver su papel en los Oscar 2021.

    Raúl Cabral.
    Puntuación personal: 8
    pepalvarez
    pepalvarez

    664 usuarios 87 críticas Sigue sus publicaciones

    4,5
    Publicada el 15 de enero de 2022
    Si que era necesaria una película de una gran película para poder ver ese cine en mayúsculas que tan bien le salen a Spielberg.
    Esos planos del barrio impecablemente fotografiado y adaptado, por el viaje en metro, por la maestría en filmar las coreografías, por Ariana deBose, porque esta versión es mucho más contundente con su mensaje antiracista y antiodio... por grande que sea la pantalla de tu casa nada como verla en una pantallaza de cine de 10 mts....
    Luis Alberto Serrano
    Luis Alberto Serrano

    5 usuarios 35 críticas Sigue sus publicaciones

    3,0
    Publicada el 21 de marzo de 2022
    ¿De verdad hacía falta un “remake” de Wide Side Story? Tenía mucha expectación por ver esta película. De todos es conocido, porque lo he dicho en muchas entrevistas, Spielberg es uno de mis maestros y lo admiraré siempre. Era arriesgado hacer una revisión de un clásico de la historia del cine. Te pone en el disparadero de las comparaciones. Aun así, yo esperaba que fuera a asumir algunos riesgos más. No quise ver la versión original para no caer en esta trampa. Sí les diré que nunca me gustó la versión de Jerome Robbins y Robert Wise cuando intenté verla hace muchos años y eso que ganó 10 Óscars. Y nunca le di una segunda oportunidad. A la de Spielberg, les aseguro que tampoco se la voy a dar.

    Valoro cosas, como el vínculo de las imágenes al cine de los años 60/70 en los que Spielberg ha pretendido homenajear imitando ese tecnicolor imperante en la época y el “look” que da el rodarla en decorados fabricados. También, los movimientos de cámara tan Spielberg en los que las cosas fluyen sin darnos cuenta y que, en esta película, ha sabido combinar con planos coreografiados entre cámara y bailarines. Esa parte, impecable. De maestro. Lo mismo que el cuidado de los detalles. Emocionante la elección de Rita Moreno que hace el papel de Anita en la versión de 1961 (y que le valió el Óscar a la Mejor Actriz de Reparto) y que interpreta a Valentina en esta nueva versión, como homenaje merecido a esa estatuilla que ganó. Esta es la magia que emociona del cine.

    Este año, también está nominada al Óscar Ariana DeBose por ese mismo papel de la hermana de Bernardo, líder de la banda de puertorriqueños. Que yo recuerde, solo Marlon Brando y Robert De Niro han conseguido el Óscar por encarnar al mismo personaje, por el papel de Vito Corleone en la saga de “El Padrino”. Para mí, ella ha sido lo que más me ha gustado de la película. Normal que esté nominada. Aunque no le veo posibilidades, lanzará su carrera más allá de los papeles en musicales que ha interpretado hasta ahora. Esa mirada que tiene le va a valer más de un contrato en el futuro. El resto del elenco, no hay nada que destacar. El casting no lo considero acertado, del todo.

    En principio, no me creo a la pareja protagonista. No me transmiten ese amor ciego que los atrapa. Creo que el guion tampoco les ayuda a ello. Me pasó como con “Titanic” (James Cameron, 1997) en el que tampoco me creí el amor entre Leonardo DiCaprio y Kate Winslet. Y si “el amor”, que es la trama central de la historia, no te la crees; pues, el resto, se tambalea. Ansel Elgort (Tony) y Rachel Zegler (María) han sido elegidos más por sus logros en los musicales de Broadway que por sus dotes interpretativas y el resultado final lo nota. Eso, unido a que sus acciones/reacciones en la película no están bien tratadas en el guion y que la trama de amor es casi un elemento secundario, los deja a una deriva que hace que no se emocione el espectador. Yo, con lo fácil que soy, no lo conseguí ni una vez.

    El fracaso de taquilla demuestra que no hacía falta esta producción. Costó 100 millones de dólares y recaudó sólo 74. Lo dejo ahí, técnicamente impecable (con los planos midiendo siempre que no se encabalguen los actores y manteniendo los encuadres con maestría), pero artísticamente superable. Y, si no vas a mejorar la versión que había, entonces ¿para qué?
    Johan600
    Johan600

    5.702 usuarios 581 críticas Sigue sus publicaciones

    4,5
    Publicada el 10 de diciembre de 2023
    Una Maravilla una auténtica Maravilla, West Side Story me ha dejado impresionado es todo un espectáculo maravilloso de principio a fin que te engancha y te entretiene muchísimo. El legendario director Steven Spielberg ha hecho uno de los mejores musicales en años con una fascinante dirección, guión, historia, bailes, ambiente, efectos y sonidos y fotografía es que todo de la película es fascinante y las actuaciones del reparto por dios son impresionantes más de los protagonistas Ansel Elgort y Rachel Zegler los dos son los que más han rompido en la película dándonos una bonita y fascinante historia de amor con bailes igual de fascinantes para mi sin duda alguna fue lo que más me encanto de la película. Me ha encantado muchísimo pero muchísimo West Side Story un bonito y fascinante Drama Romántico Musical que se merece todos los oscares y globos de oro de todas las categorías, será todo un clásico la película❤😍🤩🕺💃
    Daniel
    Daniel

    36 usuarios 103 críticas Sigue sus publicaciones

    4,0
    Publicada el 30 de septiembre de 2022
    West Side Story es perfecta, con unos visuales hermosos y atrapantes junto a una dirección de fotografía hacen secuencias magnificas que bajo la mano del ya legendario Steven Spielberg, con un cast de en su mayoria nuevos actores regalan una experiencia única, esta película es ese evento que te deja una sensación de felicidad, esta película logra ser más que una buena trama, es un sentimiento, un sentimiento a las raises culturales a la música en sí y al amor, la película no cuenta con muchos diálogos, todas las expreciones salen de la música y del baile, lo que mueve a los personajes y les da esa profundidad para ser empáticos con el espectador, lo cuál es grandioso. Ansel Elgort y Reachel Zegler hacen un trabajo de maravilla, se puede sentir la quiímica entre ellos, el como cada uno desde la perspeciva planteada por cada uno de sus personajes entiende la película y la acojen para exponer el conflicto de la misma, que junto a los actores secundarios encabezados por la magnífica Ariana DeBose, regalan coreografías espectaculares, cada una es un deleite visual, los complejos movimientos de cada una conjuntandose con una letra bellímsima y una iluminación que logran un montaje perfecto en cada una ya sea en la perfecta introducción de la película, la escena de la fiesta, la del departamento o la del barrio de Puerto Rico, cada una es magnífica, diferenciandose dependiendo los sentiminetos de los personajes, lo cual se agradece bastante; ya tenia tiempo que no veya una película en la que se notaba que los actores se la pasaran tan bien en un set. El Conflico esta bien planteado y es entenbible por parte de los 2 bandos, no hay buenos ni malos, son 2 puntos de vista iguales que chocan por el poder del territorio, Las raises culturales por la que ambos grupos se sienten orgullosos, mientras los Jets buscan el poder para seguir siendo la última generación de "blancos" Yankees, los Sharks buscan cumplir el sueño americano y de preservar su cultura, sin importar quién se les ponga en cima. La película se puede dividir en 2 partes, la primera; la busqueda de un propósito para los personajes y el quienes quieren ser en Manhattan, una busqueda que se explora en un clorido y hasta alegre entorno, lleno de colores vivrantes y un mensaje más convencional, pero sin dejar de ser importante, pero para la segunda mitad, después de un giro de guión extraordinario en la pelea en la bodega de sal, la película cambia 360 grados, uno de los mejores giros de guion que e visto, los personajes dejan la atmósfera alegre y colorida para pasar a cuadros atfixiantes y colores tenues en el que se explora aún más el lado oscuro de los protagonistas. Qué con un final aún mas inpredecible la película cierra de manera schokeate pero simplemente perfecta, el final de esta película en su oscuridad es bellísimo. West Side Story es brillante, seas fan de los musicales o no, si encuentras su belleza quedarás hipnotizado por la producción tan detallada y el entuciasmo que todos los involucrados dieron en este film, todos los aspectos en esta película son impresionantes. Steven Spielberg demuestra porque es uno de los mejores directores de la historia. Esta película en su explosividad de colores y en sus vivrantes coreografías escnonden la oscura realidad de los barrios marjinados de USA.
    Juankenove
    Juankenove

    16 críticas Sigue sus publicaciones

    3,5
    Publicada el 28 de diciembre de 2021
    Muí buena película los actores están muí bien las coreografías de baile también es expertacular y el vestuario también me a gustado espero que se lleve algún premio tiene posibilidades ir a verla es buena si te gustan los clásicos 👏👏
    paulalamas_
    paulalamas_

    1 críticas Sigue sus publicaciones

    3,0
    Publicada el 28 de diciembre de 2021
    Una película entretenida y con su toque diferente y exótico. La música es buena, aunque un poco lenta en ocasiones, pero la
    historia de amor deja bastante que desear, puesto que es muy repentina y carece de sentido (conclusión a la que se llega especialmente cuando se observa cómo María se acuesta con el chico que acaba de matar a su hermano). Hay algunas partes musicales muy buenas, originales y bien trabajadas, sin embargo, al final hay cabos que no quedan atados (como el niño que siempre defiende al protagonista pero que no es acogido por ninguna de las dos bandas; no se llega a saber muy bien cuál es su papel y qué sentido tiene en la historia).
    Ramon Borrell
    Ramon Borrell

    5 críticas Sigue sus publicaciones

    4,0
    Publicada el 5 de enero de 2022
    Si te gustan los musicales ésta es tu película. Muy bien ambientada en el West side de Nueva York de los años 60. Speelberg vuelve a bordar con nota el remake de un clàsico romàntico del Cine, en una historia de amor que desgraciadamente no convence a todo el mundo.
    Brasiliano
    Brasiliano

    52 críticas Sigue sus publicaciones

    3,5
    Publicada el 19 de diciembre de 2022
    Merece la pena ver esta película solo porque está dirigida por Steven Spielberg. Es un dorector que con el manejo de la cámara que tiene estaba predestinado a dirigir al menos un musical.

    Por otra parte, a pesar de tensión constante entre los yanquis y los puertorriqueños, el idilio romántico es demasiado ñoño y estúpido
    ¿Quieres leer más críticas?
    Back to Top