La película participó en la Sección oficial a competición del Festival de Sitges de 2018.
Christoffer Nordenrot, que interpreta a Alex en el filme, perdió 20 kilos en tres meses para aparentar ser un adolescente de 16 años. Después de 4 semanas de rodaje, tuvo que recuperar el peso perdido y ganar músculo para interpretar a la versión adulta del personaje.