Cuando parecía que el estreno de terror del año ya tenía dueño (devuélvemela), llega al poco después otra obra sublime, magistralmente rodada. Cada plano cuidadosamente ejecutado, los movimientos, la oscuridad y el enfoque. Varias historias en una sola, un cuento de terror, todos los géneros concentrados y con el objetivo de no pestañear en sus 2 horas de metraje. Amy Adams, sublime!!! Las historias bien contadas merecen ser eternas... Y esta es una de ellas!!!