En 2020, Rosa Peral fue condenada a 25 años de prisión por un crimen contra la Guardia Urbana de Barcelona cometido en 2017. Su pareja, que pertenecía al cuerpo de la Guardia Urbana, fue asesinada con alevosía por ella y por su amante, también miembro del cuerpo de seguridad del ayuntamiento catalán. Tras un proceso penal intenso, durante el cuál la condenada ha intentado mantener silencio durante años, llega para intentar ofrecer un testimonio inédito e impactante, que intente responder a todo el clamor mediático que hizo de este suceso uno de los más seguidos de la historia del crimen español.