Crítica de SensaCine.com para 3 mujeres para un caradura: Comedia neoyorquina en Los Ángeles

Que la obra del cómico Steve Martin necesita una reivindicación urgente es notorio. Son muchas sus películas y shows de televisión (aparte del 'Saturday Night Live') de los 70 y 80 como actor y guionista que merecen dicho reconocimiento, pero una película más tardía como 'Tres mujeres para un caradura' puede ser un primer escalón. Dirigida por Mick Jackson pero con guión, protagonismo y empuje creativo de Martin, se trata de una comedia romántica a tres bandas (narra los malabares que tiene que hacer un hombre del tiempo para mentener una relación con dos mujeres distintas tras separarse de su pareja) que, aparte de disponer sus tramas con una elegancia digna de comedia de enredo clásica, introduce multitud de quiebros narrativos, digresiones visuales y gags de humor absurdo con una ligereza que recuerda al Woody Allen más inspirado.

Además, Martin y Jackson consiguen que Los Ángeles y la forma de ser de sus habitantes formen parte central del relato. La estrategia resulta hilarante sobre todo durante los primeros minutos de la película, en los que se hace un retrato sarcástico e inmisericorde de la obsesión de los californianos con los automóviles y el aspecto físico. La llegada de Victoria Tennant como una británica de visita trastocará el corazón de Martin y también propiciara grandes momentos de divertido choque cultural. Por último, atención a una desatada Sarah Jessica Parker, que aquí puede tener uno de los mejores papeles de su carrera como una dependienta hiperactiva con la que el protagonista también mantiene contacto.

A favor: Steve Martin bien podría ser el Woody Allen de Los Ángeles.

En contra: Las canciones de Enya de la banda sonora resultan fuera de lugar.