Crítica de SensaCine.com para Ríos de color púrpura 2. Los Ángeles del Apocalipsis: Thriller esotérico

La novela negra tiene en Francia un éxito editorial y una tradición enorme, a pesar de que más tarde fuera relegada a un segundo plano por culpa del descubrimiento de la literatura nórdica. Pero el caso es que en el país galo, tanto los policíacos en literatura como su translación cinematográfica, son dos potentes armas de consumo. No es por ello casual que la adaptación de la novela de Jean-Christophe Grangé, "Los ríos de color púrpura", se convirtiera en un auténtico fenómeno en su país de origen. La película, dirigida por Matthieu Kassovitz y protagonizada por Jean Reno (en la piel del inspector Pierre Niemans) y el joven a su cargo, interpretado por Vincent Cassel, tuvo una excelente acogida.

Tanto es así, que se puso en marcha una segunda parte, en la que volvía a latir el género negro mezclado con un punto esotérico y sobrenatural, a través de una trama muy misteriosa en la que el inspector volvía a verse involucrado, esta vez acompañado de un nuevo discípulo, interpretado por Benoît Magimel. En esta ocasión, dirigió Olivier Dahan, que logró imprimir un buen pulso narrativo a esta película tan folletinesca, como al mismo tiempo, qué cosas, tan seria como también delirante.

A favor: Jean Reno.

En contra: Su final.