Crítica de SensaCine.com para El pianista: Las dos Españas

Mario Gas y Manuel Vázquez Montalbán a principios de los setenta colaboraron en un musical que jamás vio la luz, llamado ‘Guillermotta en el país de las Guillerminas'. Casi treinta años más tarde, escritor y director teatral volvieron a coincidir para preparar la adaptación cinematográfica de ‘El pianista', novela publicada en 1985. La película se toma la libertad de comenzar un año después, cuando Barcelona es proclamada Ciudad Olímpica, para llevarnos hasta los años de la Guerra Civil, en el momento en que se conocen Doria (Jordi Mollà) y Rossell (Pere Ponce), dos jóvenes cuyas vidas quedarán fuertemente marcadas por la Guerra Civil. La reflexión sobre los vencedores y los vencidos, con un viejo piano de cola como escenario, es una de las imágenes más potentes del filme, una suerte de ejercicio de estilo de Gas (quien debutaba con este filme como cineasta). Poco más, sin embargo, que destacar de este largometraje que se resiente en demasía del bagaje teatral del director.

A favor: No es la típica mirada sobre la Guerra Civil.

En contra: La puesta en escena.