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    Pasolini
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    2,8
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    Beatriz López Velasco
    Beatriz López Velasco

    94.493 usuarios 455 críticas Sigue sus publicaciones

    2,5
    Publicada el 10 de marzo de 2015
    [...] Mi mayor interés en esta película era Willem Dafoe, cuyo parecido con Pasolini es asombroso, el planteamiento también resultaba interesante, un homenaje al cineasta recreando el último día de su vida. Sin embargo, la narración de Abel Ferrara se ve salpicada con imágenes de las películas de Pasolini y con recreaciones de los textos en los que estaba trabajando que interrumpen lo que realmente importa, por lo menos a mí, que es saber más de la figura de Pasolini. Parece que todo su esfuerzo está en recalcar el hecho de su condición sexual y que murió por ese motivo, la película apenas dura hora y media y todas esas imágenes se sienten más de relleno que otra cosa y la estructura narrativa termina por resultar confusa.
    A Willem Dafoe parece que le gustan este tipo de papeles extremos y le vemos arriesgar una vez más. He de decir que he visto la película en VOSE y se puede oír a Dafoe hablar en francés, italiano e inglés, aunque la mayor parte lo hace en inglés, supongo que para facilitar su trabajo. En su caso no resulta raro, Pasolini era un tipo culto y acostumbrado a viajar, sin embargo, escuchar a su anciana madre y a su asistente charlando en inglés durante una comida familiar es, cuanto menos, raro.
    Atípico biopic que quizá no sea la película adecuada para hacerse una idea de la vida y obra de Pier Paolo Pasolini. Recomendable para admiradores de Abel Ferrara, resto abstenerse.
    Lourdes L.
    Lourdes L.

    127.181 usuarios 920 críticas Sigue sus publicaciones

    2,5
    Publicada el 30 de marzo de 2015
    Escasez..., sensación generalizada que no se supera en ningún momento.
    La sinopsis lo dice claro, últimas horas de Pier Paolo Pasolini, el 2 de noviembre de 1975, antes de su muerte en la playa de Ostia, Roma, a las afueras de la ciudad, asesinado tras una noche en busca de placer y aventura, rebelde, incorformista y polémico, lucha contra el poder desde su exclusiva y particular percepción del arte, polemizaba con el marxismo oficial y el catolicismo a quienes llamaba "las dos iglesias", amado y odiado por igual, venerado por su simbolismo/perseguido por los censores, pasará sus finales horas trabajando, con su madre y amigos.
    A todo ello, añádele una excepcional interpretación de Willem Dafoe que se funde, magníficamente, con el personaje para revivir y traer de vuelta su espíritu único de esencia irrepetible y la imaginación de Abel Ferrara para rellenar esas horas previas al trágico suceso donde combina las conversaciones y encuentros con sus conocidos y queridos con la fábula intuitiva de sus pensamientos respecto la obra que había escrito y de la que ofrece extractos en imágenes que toman doble sentido de vida y mensaje al ser las últimas palabras escritas por este peculiar, de oficio, escritor según rezaba su pasaporte y como a él le gustaba definirse -amén de poeta, director y filósofo- y que creía, con firmeza y por necesidad, en el derecho a escandalizar y ser escandalizado.
    Poco más se puede decir, simple, llano y en bandeja para servir un manjar que no está a la altura del comensal en el que se basa e inspira, el estímulo en la visión de estas, fatídicas por el desenlace, últimas 24 horas no va más allá del interés documental de cómo pudo haber sido tal día y la devoción o interés que suscite, en tu interior, ello; los familiares con la obra del autor protagonista lo encontrarán banal y superfluo pues, dadas las buenas intenciones, el resultado no es tan halagüeño, los más alejados y desconocedores de su trabajo y persona, que sólo la escojan por curiosidad, la hallarán igual de banal y superflua pues no te acerca, en demasía, al personaje si no sabes previamente de él y la mezcla de realidad de los hechos y fantasía obtenido de su último guión no cuadran tan espléndidamente como debería.
    Puedes llegar a apreciarla técnicamente pero, al tiempo, aburrirte enormemente lo cual te lleva a un aprobado raspado por la importancia del nombre escogido pero, también, a reticencia por la poca molestia tomada ya que, es una pena se conforme con tan poca suculencia respecto un director de tal apetencia.
    Sabe a poco y lo poco no logra despertar tu atención ni fervor, corta en duración, contenido y oferta, con la cantidad de shows de 24 horas en la vida de fulanito, estrella fugaz del momento que se cree el centro del mundo, para una que si tiene la merecida categoría, dignidad y lo merece..., un, se certifica, aprobado raspado y, más por gratitud y displicencia por quien titula esta película que por lo recibido de ella.
    Gerardo M.
    Gerardo M.

    4.449 usuarios 134 críticas Sigue sus publicaciones

    1,5
    Publicada el 22 de marzo de 2015
    El arte que imita al arte

    El Coliseo Cuadrado, en Roma, dedica en su fachada unas palabras al pueblo italiano, un pueblo de artistas, poetas, héroes, navegadores, pensadores, científicos y santos, convirtiéndose, casi de manera inconsciente, en un monumento alzado en defensa de la cultura de todo un país. Atrás quedan ya los años en que Mussolini encargase su construcción, en que se convirtiera en un icono del fascismo.
    Así, con esta contraposición de ideas, presenta y culmina Abel Ferrara su particular retrato de uno de los más grandes cineastas de la cinematografía italiana, Pier Paolo Pasolini. Un edificio que representaba, al menos en sus comienzos, una ideología totalmente contraria a la que el cineasta defendía. Y una historia, la suya propia, que transcurriría marcada por la anécdota de que su propio padre había salvado al mismísimo dictador de morir en un atentado.

    Pero más allá de esta doble paradoja socio-cultural, lo que Ferrara busca también es la provocación. Porque Pasolini era un director arriesgado, subversivo, provocativo hasta el exceso. Y el encargado de “Teniente corrupto” busca provocar y arriesgar con su nuestro trabajo. Su “Pasolini” no es un biopic al uso, no recoge la vida de su protagonista, sino que se hace eco de las últimas horas de vida del maestro, sus últimas entrevistas, en las que hablaba precisamente de los peligros del fascismo. Así, su película no se limita a mostrar una vida que bien daría para una serie de filmes, sino que trata de plasmar en imágenes las inquietudes del escritor y poeta, lo que le pasaba por la cabeza al realizador, enfrascado por aquel entonces en el doblaje al francés de su obra más transgresora, “Saló y los 120 días de Sodoma”.

    Pero todo riesgo tiene un precio. Y es que Ferrara cree que homenajear consiste en mirarse al ombligo, y pretende convertirse en el reflejo contemporáneo del personaje al que retrata. Se mete en su mente y fantasea con ofrecernos en imágenes la que podría haber sido su siguiente película, o en mostrarnos cómo él mismo habría rodado sus fantasías y relatos, con toda la violencia gráfica y explicitud sexual de las que hacía gala Pasolini. Trata de emularle en un ejercicio de soberbia y lo que le queda es una propuesta para unas minorías pertenecientes a clubes muy selectos, tediosa y aburrida.

    Y lo peor, que se queda a medias en su retrato. Ni emociona ni se convierte en un retrato acertado del artista, no consigue acercarnos a él. “Pasolini” es un homenaje ensimismado al que parece que le falta metraje. Dura ochenta minutos y parece que dura el doble, y aún así parece un montaje final cortado. Lo único salvable de ella es el trabajo de Willem Dafoe, metido en la piel de su personaje a pesar de su marcado acento inglés de Wisconsin –algo que la versión italiana intenta remediar doblando al actor con la voz de otro intérprete italiano, siendo el resultado aún peor-, en un ejercicio de imitación del artista, muy convincente. Incluso en este aspecto este proyecto es un ejemplo de arte que imita al arte.

    A favor: Willem Dafoe tratando de imitar a Pasolini
    En contra: Ferrara tratando de imitar a Pasolini; es una propuesta para minorías muy selectas
    cine
    Un visitante
    1,0
    Publicada el 30 de septiembre de 2020
    Está perra maricona mierda no sirve para una mierda yo quería era ver la película esto es un desperdicio de tiempo
    cine
    Un visitante
    0,5
    Publicada el 28 de mayo de 2015
    Es una peli francamente mala, pero mala mala, un rollo la mires por donde la mires. Es una pena que se maltrate de esta manera la figura y el recuerdo de quien fue genial director.
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