Reeker

En numerosas ocasiones, el mismo género de terror produce sus propios monstruos. Eso puede concluirse de la epidemia de finales sorpresa con aliento metafísico-trascendental que llegaron a las distintas corrientes del horror tras el éxito de 'El sexto sentido'. Dentro de ese terreno, el caso de 'Reeker' puede ser uno de los más deleznables. Su presupuesto, acabado y, siendo generosos, ambiciones son las de un mero producto de serie B, pero eso no da carta blanca a la película de Dave Payne para ser tan abiertamente tramposa e incoherente sin reprimenda. Lo que empieza como una especie de variación sobre el típico slasher rural de carretera, con su grupete de amigos aislados en un paraje inhóspito donde son acosados por algo o alguien, intenta meter ganchos para asegurarse cierto seguimiento de culto entre los ratones de videoclub (o deberíamos decir de ficheros AVI) y lo único que consig