Orfeo consiguió una nominación en la categoría de "Mejor Película" en los Premios BAFTA de 1951.
La película se inspira directamente en el mito de Orfeo, transpuesta en el mundo contemporáneo, con un simbolismo rico.
La película está llena de escenas con efectos especiales al revés: verticales, negativos fotográficos, así como el uso de espejos "líquidos".