Colin de cuentas es una serie de comedia romántica que protagonizan Ashley y Gordon, dos dos solteros algo egocéntricos, también imperfectos y divertidos, que tratan de sobrevivir a sus propios fracasos sentimentales. El día que Gordon va de mal en peor, acaba atropellando a un perro callejero. Gordon iba distraído porque una atractiva desconocida, Ashley, se le cruza en el paso de peatones y le enseña un pecho gratuitamente.
Ambos se verán entonces forzados a colaborar para cuidar al perro herido. La inercia de la situación los llevará a tener que soportarse, e incluso mostrar su cara más honesta. Todo con la excusa de cuidar al bueno de Colin, el perro que Gordon atropelló.