Jessica Savitch es recordada a día de hoy por ser una de las figuras más influyentes de la televisión estadounidense durante la década de los setenta y principios de los ochenta. Fue pionera como mujer presentadora de un informativo nacional y su vida profesional estuvo marcada por un rápido ascenso a posiciones que, tradicionalmente, estaban reservados al hombre blanco heterosexual. Su vida terminó trágicamente cuando solo tenía 36 años.
Fue en 1977 cuando ingresó en NBC News como presentadora del NBC Nightly News los fines de semana, convirtiéndose en una de las primeras mujeres en EE. UU. en presentar un telediario nacional. Fue un rostro habitual también en programas como Frontline de la PBS. Recibió cuatro premios Emmy y llegó a ser considerada la cuarta presentadora de noticias más confiable del país, superando a muchos compañeros hombres (blancos y heterosexuales).
Como no podía ser de otro modo, Savitch fue un referente de muchas mujeres que querían ser en un futuro periodistas. Y no solo influyó en las chicas estudiantes: su carisma, su temple ante la cámara y la capacidad que tenía de conectar con su audiencia marcaron un nuevo rumbo dentro de la industria.
Un accidente que terminó en tragedia
Su vida era, sencillamente, exitosa y feliz. Sin embargo, en 1983, solo seis años después de comenzar a ser la presentadora más influyente de los EE. UU, Jessica Savitch murió en un accidente de tráfico en New Hope, Pensilvania. Tras compartir cena con Martin Fischbein, vicepresidente del New York Post, el vehículo en el que viajaban se precipitó a un canal durante una fuerte lluvia, quedándo sumergido el vehículo bocabajo. Ambos -junto con la mascota de la presentadora- quedaron atrapados y fallecieron por asfixia. Su muerte produjo una tremenda conmoción en los EE. UU. La utopsia no reveló signos de violencia o sustancias inusuales en su cuerpo, lo que disipó la sospecha del alcohol u otras drogas.
Y esto último sobrevoló la mente de muchos, ya que Savitch, durante su carrera, se vio envuelta en algunas polémicas relacionadas con un presunto abuso de alcohol y otras sustancias. En octubre de 1983, durante la emisión de un telediario en directo, Savitch apareció un tanto desorientada y con dificultades para hablar. Esto alimentó los rumores de abuso de drogas, aunque oficialmente este suceso se atribuyó a efectos secundarios de medicación para una cirugía reciente.