Wanted (Timur Bekmambetov, 2008)
De un tiempo a esta parte, Mark Millar se ha convertido en uno de los autores de cómics más respetados y adaptados al cine, siendo común en su obra una violencia descarnada y un ácido sentido del humor. Kick-Ass y Kingsman -y sus secuelas- sabían administrar estos elementos al tiempo que eran fieles a la esencia de las viñetas, pero Wanted jugó en otra línea distinta.
Universal Pictures
Y es que el cómic, visto en frío, era bastante inadaptable, no tanto por lo extremo de las escenas de acción visualizadas como por lo macabro y fantasioso de sus personajes, que encontraba un 'highlight' en Shithead, un monstruo formado por las heces de las 666 personas más malvadas del mundo. Algo muy molón, sí, pero muy poco cinematográfico, cuya eliminación fue sólo uno de los muchos cambios que acabaron haciendo de la Wanted fílmica algo irreconocible y, sobre todo, muy soso. En caso de que funcionara, los productores querían más secuelas, pero el que Mark Millar no hubiera escrito ninguna fue el menor de los problemas.
Jumper (Doug Liman, 2008)
Ese mismo año, Doug Liman recurrió a un Hayden Christensen que acababa de terminar La venganza de los Sith para protagonizar un film que, a diferencia de muchos de esta lista, no dependía de ningún material previo. Y también, al contrario de muchos de esta lista, no fue un fracaso ni mucho menos. Aunque la película fue abucheada por gran parte de la crítica internacional, la taquilla fue bastante benévola con ella, dándole carta blanca a Liman para rodar la secuela que había planeado junto a Steven Gould.
20th Century Fox
Sin embargo, y para disgusto de los fans de la película -que, en serio, los hay; hasta podemos estar hablando de una obra de culto- la secuela se fue postergando indefinidamente, mientras Liman iba aceptando proyectos -entre ellos la muy aplaudida Al filo del mañana-, y la historia de estos saltadores permanece inconclusa.
