HBO Max ha puesto toda la carne en el asador con The Last of Us y el resultado se nota en pantalla. La serie adaptación de la saga de videojuegos de Naughty Dog está arrasando en audiencia y de momento sin ningún altibajo. Ni siquiera La Casa del Dragón lo logró, pero la ficción postapocalíptica ha logrado subir en audiencia en cada uno de sus episodios emitidos hasta la fecha. Y así podría mantenerse, puesto que esta semana evitará enfrentarse a la SuperBowl y estrenará su quinto episodio en la madrugada del viernes al sábado.
El éxito es merecido. The Last of Us es una auténtica maravilla por varias razones. Su trama es cautivadora, convincente y absolutamente adictiva, Pedro Pascal y Bella Ramsey lo bordan como Joel y Ellie, a la adaptación del videojuego es francamente buena y, por si eso fuera poco, visualmente tiene una factura espectacular.
Desarrollarla no ha sido precisamente barato, como imaginarás, y, de hecho, The Last of Us cuenta con uno de los mayores presupuestos en televisión, con 15 millones de dólares por episodio según ha sido reportado. Pero sin duda es un dinero bien invertido.
Dicho esto, quizá te sorprenda saber que el equipo no pudo llevar a cabo uno de sus planes iniciales por falta de presupuesto. Así lo han confesado ellos mismos en su participación en el podcast oficial de la serie, en el que, tras la emisión del episodio 2, el 'showrunner' Craig Mazin admitía que tuvieron que cambiar de idea para el comienzo del capítulo por no tener dinero suficiente para materializar su plan inicial. ¿Su idea? Abrir el episodio retratando la condición de las personas en diferentes partes del mundo tras el brote.
Teníamos planes para un montaje en el que veíamos todos estos lugares del mundo y lo que les había sucedido, y simplemente no teníamos el dinero para hacerlo. Pero pensamos que sería realmente interesante ver dónde comienza todo
Y así fue como dieron con la idea de mostrar cómo comenzó todo en Yakarta, Indonesia, que es con lo que finalmente abrió el capítulo. No obstante, tuvieron muchas dudas sobre hacerlo, porque, según admitió Mazin, tenían miedo que una escena ambientada en Yakarta pero en el pasado pudiese generar algo de confusión. Afortunadamente decidieron asumir el riesgo y la escena se ha convertido en una pieza clave para justo lo contrario: comprender que la infección y el brote no solo afecta a los Estados Unidos.
