4. Vender 'The National Anthem' como capitulo piloto fue toda una experiencia
Netflix
La verdad es que Black Mirror empieza fuerte. El primer episodio de la ficción, una sátira que lleva al absurdo al primer ministro británico (interpretado por Rory Kinnear) pasando por situaciones límite como sexo con animales es cuanto menos impactante. Imagina cómo tuvo que ser vendérselo a una cadena. De eso ha hablado también Brooker. “Hubo una reunión en la que tenía que presentar el contenido a Channel 4”, explica. “Fue una tarde interesante. La pregunta principal no fue sobre la historia, simplemente se preguntaron si era necesario que el animal fuese un cerdo”, recuerda entre risas. “Propuse que podía ser un pollo congelado del supermercado, pero finalmente volvimos a la idea del cerdo”.
