Crítica de SensaCine.com para Arrástrame al infierno: Condénate por ambición

Después de la intensa experiencia con la trilogía 'Spider-Man', el director Sam Raimi, de alguna manera, quiso reivindicar sus orígenes dentro del cine de terror de serie B para pisar tierra después de tres blockbusters consecutivos. 'Arrástrame al infierno' es su particular píldora resarcidora, una cinta pequeña de espíritu revulsivo y vigorizantes resultados en la que el director juguetea con los códigos básicos del género aportando toda la asombrosa calidad técnica acumulada durante estos años de experiencia.

Una película fresca, una gran carrusel repleto de guiños, sustos, que, a pesar de constituir materiales de derribo, se perciben en manos de este mago de terror como si se vieran y se disfrutaran por primera vez.

'Arrástrame al infierno' es una gran carcajada al sueño americano, a las expectativas y a los sueños de los jóvenes que nunca se cumplirán. Como toda buena película de cine de terror que se precie, contiene unas buenas dosis de crítica y mala leche. Y ahí es cuando las dudas morales que se imponen a lo largo de cualquier carrera laboral, se convocan como una dura penitencia cuando se traspasa la barrera de la codicia y el egoísmo. ¿Estamos dispuestos a hacer cualquier cosa por conseguir el éxito profesional? He aquí una divertida y desvergonzada película acerca de las consecuencias.

A favor: El espíritu de la anciana.

En contra: Que se critique su capacidad desprejuiciada.