La historia de la mayor estrella de la ópera del mundo. Durante la década de los setenta, María Callas, vivió durante varios años, recluida voluntariamente bajo los efectos de las drogas en su pequeño apartamento situado en París.
En 1977, la suerte vuelve a llamar a su puerta cuando su gran amigo el productor, Larry Kelly, decide llevar a cabo un proyecto en el que le propone interpretar a Carmen en la película titulada Callas Forever. Tras varias negaciones de la artista, finalmente decide aceptar y formar parte del proyecto. Pero no conforme con su intervención, propone interpretar a Tosca a lo que Larry decide acceder. Su interpretación se convirtió en una de sus mejores actuaciones, de toda su carrera artística.