Uno de la Mara
por Nestor HidalgoEl debut en la dirección de largometrajes del estupendo director de fotografía Cary Fukunaga cuenta con guión propio y un amplio proceso de documentación anterior para contar un vibrante thriller criminal ambientado en los usos, costumbres y lealtades de la temible Mara Salvatrucha, una de las organizaciones criminales más peligrosas de América Central. Rodada sobre el terreno en México y con numerosos actores locales, la película cuenta la historia de dos personajes a la deriva y recuerda a cumbres del género como 'Uno de los nuestros' (Martin Scorsese, 1990) y 'Ciudad de Dios' (Fernando Meirelles, 2002).
Casper es un joven mexicano miembro de la Mara que, después de asesinar al líder de su banda por haber matado a su novia, tiene que huir de la caza implacable a la que es sometido por el resto de la organización. Sayra es una adolescente hondureña que está cruzando el país con su padre y su tío escondidos en techos de trenes como inmigrantes ilegales camino de Estados Unidos. Con una contundencia enmudecedora y muy madura para estar hablando de una opera prima, el cineasta evita caer en clichés del cine altermundista para centrarse en su historia de perdición y crueldad en la que no faltan emocionantes momentos de ternura arropados por unos paisajes apabullantes y una sensación de tragedia irremediable impregnada en la atmósfera. De los mejores debuts que sen han visto en el cine norteamericano durante el último lustro.
A favor: El ritmo pausado, contemplativo y no exento de violencia con el que Fukunaga desgrana la narración.
En contra: El afianzamiento de la relación entre Casper y Sayra habría salido beneficiado de mayor metraje.