Hace 25 años llegaba a las salas de cine una película que recordaríamos para siempre: Ghost (Más allá del amor), una historia romántica sobrenatural que no solo fue la más taquillera de 1990, sino que en el momento de su estreno también se posicionó como la tercera película con mayor recaudación de la historia. El filme, dirigido por Jerry Zucker y protagonizado por Patrick Swayze, Demi Moore y Whoopi Goldberg amasó más de 500 millones de dólares frente a sus poco más de 20 de presupuesto y fue objeto de buenas críticas principalmente.
Ghost fue, además, una de las grandes protagonistas en su edición de los premios Oscar, siendo nominada a cinco categorías entre las que se incluía la de Mejor película. Finalmente se llevó dos: Mejor actriz secundaria para Goldberg y Mejor guion original para Bruce Joel Rubin.
Ghost está disponible en el catálogo de Prime Video, aunque también la encontrarás con tu suscripción a Movistar Plus+.
En ella, Patrick Swayze, que no fue el primer candidato para el papel, cautivó al mundo con su interpretación de Sam Wheat, un trabajador de banca que vive felizmente enamorado junto a su novia, Molly (Demi Moore), con quien acaba de estrenar la casa de sus sueños. Su vida es aparentemente idílica hasta que una noche, de regreso a casa, son atacados en la calle y Sam recibe un disparo. Aunque tarda un poco en ser consciente de lo que ha ocurrido, Sam acaba dándose cuenta de que ha muerto y que ahora está atestiguando la escena como un espíritu.
Tras aceptar que está muerto, Sam es capaz de ver lo que sucede en el mundo real pero nadie entre los vivos puede percibirlo. Sin embargo, al visitar a Molly descubre que lo que le sucedió realmente no fue un accidente y que su chica está en peligro. Atrapado entre dos mundos, la única forma de poder salvarla y por fin poder descansar tranquilo será entrar en contacto con una divertida medium que en realidad no sabía que podía hablar con los muertos.
Absolutamente tierna y conmovedora pero con divertidos momentos, la película no solo es una de las más emblemáticas de los 90, sino que también es una de las cintas románticas más populares y queridas de la historia. Además, una de sus escenas, en la que, cuando todavía está vivo, Molly enseña a Sam a moldear arcilla mientras suena Unchained Melody de The Righteous Brothers, es considerada como una de las secuencias cinematográficas más famosas de la historia y lo sigue siendo a día de hoy.
