La diferencia de salarios en Hollywood por género y edad es un tema controvertido y muy comentado desde hace tiempo, pero hace casi 90 años, una perra cobró más que algunos actores humanos.
Terry, la cairn terrier que interpretó a Toto en El mago de Oz (1939), ganaba 125 dólares semanales por dar vida al perro de Doroty (Judy Garland), tal y como señala LA Times. Si esa cifra la ajustamos a la inflación, Terry cobraba unos 2.729,38 dólares. Ese dinero, claro, iba a parar a manos de su entrenador.
Además de llevar a cabo todas sus escenas de acción, Terry sufrió una lesión durante el rodaje de la película de fantasía dirigida por Victor Fleming, King Vidor y George Cukor. La perra se rompió el pie por un pisotón accidental.
La tierna historia Priscilla Montgomery Clark, una de las munchkin de 'El Mago de Oz'. Tiene 95 años y es una de las pocas supervivientes del elenco original de la películaEl mago de Oz no fue la primera película de Terry, pues ya había trabajado en siete filmes previos. Fue elegida porque encajaba con la descripción del personaje en la historia escrita por L. Frank Baum en la que se basa la película.
Las diferencias de salarios entre actores
MGM
La diferencia de salarios entre Terry y otros actores humanos no era la única de El mago de Oz. Por ejemplo, Garland ganaba 500 dólares semanales -unos 11.000 dólares si lo ajustamos a la inflación- mientras que Ray Bolger y Jack Haley -el Espantapájaros y el Hombre de Hojalata, respectivamente-, cobraban 3.000 dólares por semana. Bert Lahr, el León Cobarde, ganaba un poco menos: 2.500 dólares por semana. Margaret Hamilton, encargada de interpretar a la Bruja Mala del Oeste, tenía un salario de 1.000 dólares semanales.
Los que menos cobraban eran los actores que daban vida a los munchkins, los habitantes del reino en el que aterriza la casa de Dorothy. Ganaban mucho menos que Terry: 50 dólares por semana. Los que tenían un papel más destacado cobraban unos 75 dólares y los que fueron contratados directamente por el estudio MGM alcanzaron a ganar 100 dólares. Tenían que cantar, bailar y, en ocasiones, interpretar a más de un personaje y, aun así, ganaban menos que Terry.