El nombre de Phil Tippett no te sonará de nada, pero gracias a él las sagas Star Wars, Jurassic Park y Robocop tienen más encanto. Fue encargado de 'stop-motion' en todas ellas y dirigió el departamento de animación de ILM junto con Jon Berg para El Imperio Contraataca. Pero siempre tuvo ganas de más y quiso realizar sus propias películas. En 1984 fundó Tipett Studio, su propia compañía, con la que rodó una película experimental de 10 minutos titulada Prehistoric Beast.
Cuando llegaron los efectos generados por ordenador, Tippett no solo no perdió el empleo, sino que se especializó en el CGI. Cuentan varias fuentes que cuando Steven Spielberg le dijo que los dinosaurios de Jurassic Park serían creador por ordenador, él dijo: "me acabo de extinguir". Una frase, que, por cierto, acabaría en el montaje de la cinta.
Tipett ha dedicado toda su vida al diseño de mundos ficticios para otros directores, a la espera de poder sacar adelante su propia película de animación independiente. Lo consiguió en 2021 después de 30 años de trabajo y varias campañas de financiación. No sin antes sucumbir a sus propios nervios.
30 años para realizarla y una crisis nerviosa
Tippett comenzó a trabajar en Mad God en los años 90, pero lo abandonó para centrarse en otros proyectos que llevaba su propio estudio. Como recoge la página oficinal del proyecto, décadas después de que el éxito de Tippett Studio paralizara la producción, un grupo de animadores de Tippett Studio encontró cajas de utilería y marionetas abandonadas. Tras ver el material original, convencieron a Phil de que resucitara el proyecto. El pequeño grupo empezó a ofrecer sus fines de semana como voluntarios para Mad God, y en poco tiempo se convirtió en un equipo de más de 60 artistas.
En 2010, año en que lo retomaron, no contaban con la financiación suficiente para llevarlo a cabo, así hizo lo que cualquier cineasta amateur tiene como primera opción: una campaña de Kickstarter. "Mad God es una película de animación experimental, hecha a mano, ambientada en un mundo miltoniano de monstruos, científicos locos y cerdos de guerra", presentó, "los decorados, las criaturas, los efectos y el espíritu son, en todos los sentidos, independientes y creados con el corazón. A veces, ese corazón rebosa de amor por el oficio, mientras que otras veces está perforado y sangrando por todas partes... 24 fotogramas por segundo".
Precisamente Mad God tardó 30 años en hacerse porque está hecho con todo el mimo de Tippett. Y quizás por esto, cuando tan solo quedaba un año para que se estrenara, a Tippett le dio una crisis nerviosa que le mandó al psiquiátrico. "Descubrí en esta película que era unipolar y que cuando no te controlan ni te recetan medicamentos simplemente dices, 'Whoosh'. Así. Terminé en el pabellón psiquiátrico durante unos días y me llevó un par de meses recuperarme", declaró el director, "Acabé odiando el proyecto. Era solo cuestión de ponerme al volante y terminarlo. Mis amigos y familiares me vieron disminuir y convertirme en esta cosa que era como un vagabundo. Fue una experiencia religiosa y una conversión. No parezco diferente, pero sé que lo soy. Me cambió hasta el punto de que ya no quiero hacer nada con mis manos. Quiero hacer algo más con mi mente".
Mad God llegó a estrenarse el 5 de agosto de 2021 y fue lanzada mediante la plataforma Shudder el 16 de junio de 2022. Llegó a solo dos salas en su primer fin de semana, pero el alcance fue creciendo y terminó expandiéndose a 26 salas. En total, recaudó 325.000 dólares, pero lo más valioso es que fue unánimemente aplaudido por la crítica. "Un deleite visual para los cinéfilos, Mad God demuestra que incluso en la era de la CGI, el atractivo cinematográfico de la animación stop-motion sigue siendo fuerte", dice el consenso de Rotten Tomatoes. Sin duda, una delicia de las que ya no se hacen para los cinéfilos.