De acuerdo, no es un festivo en sí, pero si lo que nos ha vendido la ficción es cierto, el baile de fin de curso es un momento crucial en la vida de cualquier adolescente. Aunque no siempre es fácil, como dejan claro Las ventajas de ser un marginado o, en su versión extrema –y sangrienta-, Carrie.
Disfrutar con tus amigos y, sobre todo, salir a la pista de baile con tu amor es la clave de los bailes ficticios que nos dejan películas míticas como 10 razones para odiarte, Grease e incluso Regreso al futuro, donde el gimnasio del instituto se convierte en un escenario clave. Por eso debes cuidar tu vestuario, aunque corras el riesgo de repetir vestido, como sucedía en el 1x20 de Beverly Hills, 90210. Además, la elección de los reyes del baile –que se coronarán como ganadores de la noche y del año- es otro indispensable, aunque Chicas malas nos enseña que no todo vale.
Paramount Pictures
Por supuesto, hay quién eleva el baile a otro nivel, como sucede en Crónicas Vampíricas y especialmente en Gossip Girl, donde ya solo los vestidos de diseño de las protagonistas deben costar más que cualquiera de las fiestas mencionadas anteriormente. Más económico y original era lo visto en Glee, pues en 'Bailesaurio' la temática del evento eran… los dinosaurios. Por último, no debemos olvidarnos de la reivindicación, ya que en 'El Anti-baile' de Dawson crece los protagonistas montaban un evento alternativo como lucha contra la homofobia del instituto.
