Batman tan solo llevaba 58 números de existencia cuando apareció por primera vez El Pingüino, un villano que se convirtió inmediatamente en un clásico y que, aunque respondía a la locura propia de los años 40, ha conseguido sobrevivir a las crisis de DC y a los renacimientos de su contrincante. De hecho, la prueba de ello es que no solo apareció en la serie de Batman de los 60, sino que también hizo su aparición en el Batman Vuelve de Tim Burton y, ahora, se ha ganado el derecho a tener serie propia. Nada mal para un enemigo nacido de la locura de una década imposible para el cómic.
¿Pingüino? Pues tiene tarifa ahora
Conste que Matt Reeves no quería esta serie de ninguna de las maneras, al menos cuando DC se lo propuso. De hecho, él pretendía usar al personaje en una secuela de su The Batman, pero al final no le quedó más remedio que aceptarlo. Originalmente, la serie que se iba a estrenar era una basada en el departamento de policía de Gotham (al estilo de la fabuloso cómic Gotham Central), pero decidieron centrarse mejor en Colin Farrell y el que es ya uno de sus personajes más icónicos.
Pero el actor no iba a hacer una serie si no era con calidad y por todo lo alto. Pese a todo, es sorprendente ver cómo su showrunner, Lauren LeFranc, se fijó en todos los detalles. Por ejemplo, en el episodio 1 hay un momento al inicio donde nuestro protagonista habla sobre un nuevo ambientador que ha comprado para el coche, y lo orgulloso que está del olor y de su calidad... Solo para, justo al final, descubrir que tras él se esconde un cuchillo de emergencia. A eso se le llama plantar las semillas y esperar a que crezcan.
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A pesar de que originalmente Farrell dijo que no tenía ningún interés en volver a ponerse el traje del personaje, lo cierto es que después de todos los premios que ha recibido gracias a su papel, lo ha reconsiderado... Y, por lo que sabemos, tanto Reeves como LeFranc ya se han reunido para ver qué pueden hacer en una temporada 2. Vamos, que tenemos pingüino para rato.