Mi madre no entiende por qué veo 'El príncipe dragón' de Netflix con 35 años... y yo creo que es la serie de animación del momento

La princesa prometida (1987) siempre me trae buenos recuerdos. No sólo por su historia y por ese "Como desees" que todavía, años después, resuena en mi mente. Sino también porque representa las opiniones divergentes que tenemos mi madre y yo sobre la animación. Ella simplemente no entiende que con 35 años vea series de dibujos como El príncipe dragón de Netflix, para mí una de las mejores en la actualidad. En eso se parece a El milagroso Max interpretado por Billy Crystal en la cinta de Rob Reiner. Me observa con una sonrisa, con tierna lástima, y me dice: "Estás volviendo a tu tierna infancia". Vamos, que ella, entre tanto color, espadas y dragones, entiende un "farolero" donde yo escucho claramente, como Iñigo Montoya, "amor verdadero". Así que me toca hacer de Peter Falk y convenceros a mi madre y a ti de que El príncipe dragón merece la pena. Ponte cómodo/a y prepárate para escuchar un 'cuento'.

"Esgrima. Combates. Torturas. Venganzas. Gigantes. Milagros. Persecuciones. Fugas. Amor verdadero". La serie de Aaron Ehasz (Futurama, Avatar) y Justin Richmond (Uncharted 3) para el gigante de 'streaming' tiene todo lo que el abuelo de La princesa prometida le garantizaba a su nieto y mucho más. Repite la estructura de La leyenda de Aang, que se dividía en libros y capítulos, y se sirve de modelos narrativos clásicos como la forja del héroe, la búsqueda y el viaje y el regreso con tres pequeños adolescentes de distintas razas como protagonistas. En el fondo, adopta la forma de un relato fantástico de aprendizaje y de crecimiento con personajes poliédricos, como ya lo eran Aang, Katara, Sokka y Zuko.

Tienes tiempo de sobra para engancharte. De momento, la ficción consta de dos temporadas -Libro I: Luna y Libro II: Cielo- de nueve episodios cada una. Y cada capítulo, de media, dura 26 minutos. ¡Eso se traduce en menos de ocho horas de tu vida pegado a tu televisión, tu ordenador o tu 'tablet'! Si me preguntas, exige muy poco para todo lo que te da a cambio. Menos mal que Netflix y Wonderstorm, el estudio fundado por Ehasz, Richmond y Justin Santistevan, han anunciado recientemente durante la WonderCon 2019 de Anaheim, en California, su renovación por una tercera entrega, todavía sin fecha confirmada. ¡Y además hay un videojuego en marcha! Pero cómo empieza, te preguntarás...

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"Hace mucho tiempo, Xadia era una tierra... rica en magia e ilusión. En aquellos tiempos, sólo había seis fuentes primigenias de magia. El sol. La luna. Las estrellas. La tierra. El cielo. Y el mar. Pero hace mil años, un mago humano descubrió una nueva magia. La séptima fuente. La magia oscura. Se nutría de la esencia de las criaturas mágicas para liberar un poder oscuro. Horrorizados por lo que vieron, tanto elfos como dragones detuvieron esa locura. Condujeron a todos los humanos hacia el oeste. Y así el continente quedó dividido en dos. Al este, las tierras mágicas de Xadia. Y al oeste, los reinos de los humanos. Durante siglos, el rey de los dragones defendía la frontera. Los humanos lo llamaban Trueno porque, al hablar, su voz hacia temblar tierra y cielo. Pero en la víspera del comienzo del invierno, los humanos utilizaron esa horrible magia oscura para asesinar a Trueno. Y así, sin clemencia, destruyeron su único huevo. El de su heredero, el príncipe dragón. Ahora, el mundo está a punto de librar una guerra sin tregua".

Y eso en poco más de tres minutos. Empiezas a verla y ya sabes perfectamente dónde te encuentras, lo que sucedió hace un milenio y el porqué de la enemistad entre humanos, elfos y dragones. Normalmente, incluso tratándose de El Señor de los Anillos de Tolkien, suelo perder a mi madre inexorablemente justo cuando la palabra "elfos" sale de mis labios. Se me quedó grabada una genialidad suya sobre la trilogía de Peter Jackson similar a: "Nueve horas para tirar el Anillo ese a la lava y ahora [a Frodo] le entran remordimientos". No es matemático... pero ya son muchos años conociéndonos. La costumbre hace que la pronuncie ahora con sigilo y un atisbo de duda. Como si tuviese miedo a la negativa. Algo como: "Salen... ¿elfos?". Espero y cuento mentalmente: "Tres... dos... uno...".

Pero sigamos con nuestra 'batallita' porque, al oeste del mapa, donde los humanos fueron desterrados, estos fundaron cinco reinos, liderados por Ahling de Neolandia, Florian de Del Bar, Fareeda de Evenere, la interesante y jovencísima Aanya de Duren, hija de Annika y Neha -El príncipe dragón es también la primera obra televisiva para niños en presentar abiertamente una relación homosexual-, y el rey Harrow de Katolis. Con la muerte de Trueno, los elfos cruzan La Brecha, la frontera entre las dos mitades del continente, e intentan asesinar a Harrow y a su heredero, el príncipe Ezran. Pero es entonces cuando Ezran, su hermanastro mayor Callum y la elfa de la luna Rayla -te engancharás al acento escocés de Paula Burrows en su versión original- descubren que el huevo del rey de los dragones no fue destruido, sino robado por el hechicero Viren, consejero de Harrow. Para prevenir una guerra entre humanos y elfos, este singular trío decide emprender un viaje para devolver el huevo a los dragones. Lo que no saben es que Viren, que asume el poder tras la muerte del monarca, decide enviar a sus hijos Claudia y Soren, una practicante de magia oscura y un soldado, detrás de ellos.

Aunque hay que reconocer que no hay demasiadas críticas para ninguna de ellas, las dos temporadas existentes anotan un increíble 100% de puntuación en Rotten Tomatoes. La primera se dedicaba sobre todo a presentar un mundo plagado de detalles y a explicar el conflicto entre las razas que lo habitan con Ezran, Callum y Rayla en su intento por conseguir la paz. Puede que parezca que es para niños, pero nunca es condescendiente con el público infantil; entabla una conversación con el espectador, es inteligente, ambiciosa, detallada y amplía sus horizontes en los siguientes nueve episodios. Medios como Polygon han alabado la serie por ralentizar su ritmo una vez construida su mitología para centrarse en la evolución emocional de sus personajes. A veces recuerda a Juego de tronos, con personas tomando decisiones en distintos lugares, cada una de ellas a un compás, y un gran 'flashback' que le da sentido a la trama. "Siempre habíamos tenido en cuenta que parte de la historia de estos personajes y de su viaje era comprender qué sucedió en el pasado y qué está pasando ahora. Cómo afectan estas ondas al presente y cómo condicionan las decisiones que Rayla, Ezran y Callum tienen que tomar", contaba Ehasz.

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Sin desvelarte demasiado -¡No queremos contarte muchos 'spoilers'!-, te diremos que la segunda parte obliga a los protagonistas a dejar de ser niños para convertirse en adultos. La primera entrega llegaba a Netflix en septiembre de 2018 y la segunda lo hacía a mediados de febrero de este año. Si continúa esa tendencia, la recién anunciada tercera temporada podría estrenarse en verano. "No tenemos escrita una biblia de la serie", advertía Ehasz en febrero en declaraciones a Inverse. "Todo está aquí arriba. Así que si nos estrellamos en un accidente de avión, puf, todo desaparece". "Tenemos muchas ideas y podemos seguir y seguir siempre y cuando la gente quiera", comentaba a su vez Richmond.

La saga The Legend of Zelda -Phantom Hourglass, Breath of the Wild...-, Final Fantasy, Dragon Quest, Ni no Kuni II: El renacer de un reino, Slayers, La leyenda de Korra, Octopath Traveler, Fullmetal Alchemist: Brotherhood, ¿Qué tiene de malo intentar ligar en una mazmorra?, el 'isekai' Sword Art Online, Buffy, cazavampiros... Si te gusta alguno de estos títulos, no puedes pasar por alto El príncipe dragón. Lo que dicen los 'showrunners' es cierto. El universo de Xadia tiene unas posibilidades casi infinitas. Presuponemos que existen seis subespecies de elfos, cada una de ellas conectadas a una de las fuentes primigenias de magia, pero sólo hemos visto cuatro tipos durante los libros Luna y Cielo.

¿Veremos a los elfos de la tierra y del mar durante la tercera temporada? ¿Sabremos más sobre la general Amaya, la tía sorda de Callum y Ezran y una de las favoritas de un servidor? ¿Y sobre los otros cuatro reinos humanos y, vía 'flashbacks', sobre la reina Sarai de Katolis? ¿Hasta dónde llegarán Viren y su hija Claudia por dominar el control que ejercen sobre la magia oscura? ¿Quién es realmente Aaravos -'spoilers', ¿recuerdas?- y qué importancia tendrá? ¿Por qué no podemos tener todos a Cebo, el sapo resplandeciente de Ezran, como mascota? Y lo más importante: ¿os he convencido a mi madre y a ti de que El príncipe dragón de Netflix es una de las mejores series de animación que puedes ver? Aquí es donde yo debería preguntarte: "¿La verás?". Y tu respuesta, como la de Westley, el gran amor de Buttercup en La princesa prometida, debería ser: "Como desees". Cuando mi madre se entere de que ahora me voy a poner con Love, Death & Robots... Ya escucho su voz en mi cabeza.