Crítica de SensaCine.com para Escondido en la memoria: Memoria latente

John Dahl, el realizador de Montana que en los últimos años parece haber dejado de lado la gran pantalla para hacer carrera televisiva (tras TV movies o series de televisión como Dexter, Californication o Crónicas vampíricas), dirigió después de La última seducción un nuevo filme con Linda Fiorentino como protagonista femenina.

Escondido en la memoria combina el género del drama con el del thriller psicológico y unas cuantas notas de ciencia ficción. Cuenta la historia de David Crane (Ray Liotta), un médico forense cuya esposa fue salvajemente asesinada. David trabaja para la policía de Seattle y tiempo después sigue atormentado, y algo amnésico, por no haber sabido resolver el caso de su mujer. Cuando conozca a la científica Martha Briggs (Linda Fiorentino), ambos se adentrarán en el terreno de la experimentación cerebral a través de drogras que permiten la manipulación de la memoria. Sin embargo, uno ya sé huele qué sucederá tras pasar quince minutos de cinta y no acaba de colar demasiado bien ese as en la manga científico que se juega el guión. Resulta previsible y poco estimulante el devenir de las pesquisas y la gradual aproximación de ese viudo que busca en su memoria herida lo que no supo encontrar en la realidad. La estructura y el ritmo narrativos, además, avanzan torpemente a trompicones.

A favor: Su prometedor arranque.

En contra: Que vaya desinflándose tan sonoramente y que acabe resultando tan previsible, además de que la cuestión científica acaba resultando más un pegote que un motivo verdaderamente desarrollado.