Crítica de SensaCine.com para Tumba abierta: Se busca compañero de piso

Todavía no eran una de esas películas alucinadas y videocliperas que se han convertido en su marca de fábrica, pero 'Shallow Grave', la ópera prima de Danny Boyle, sigue siendo un disfrutable film de serie B, donde el cineasta británico estableció algunas algunas de sus alianzas laborales: el guión está firmado por su habitual John Hodge, y los dos protagonistas masculinos, Christopher Eccleston y Ewan McGregor, se convirtieron en dos de sus intérpretes recurrentes al principio de su carrera.

La película es un cuento negro que se desarrolla casi en su totalidad en un apartamento que comparten un periodista cínico, una médico muy segura de sí misma y un contable tímido. Los tres ponen de manifiesto su poca empatía con la especie humana en sus audiciones para encontrar un cuarto compañero de piso. Cuando el elegido fallece inesperadamente dejando tras de sí una maleta llena de dinero, los tres personajes se enzarzan en un mortal juego de traiciones y dobles juegos, cargado de una oscura ironía que obliga a ver el film con la sonrisa torcida hasta su fotograma final.

A favor: el casting de inquilinos, donde los tres personajes ejercen de jueces implacables que ni en 'Factor X'.

En contra: un exceso innecesario de misantropía.