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    Adam
    Anédotas sobre "Adam" y su rodaje

    Los hombres son de Marte, las mujeres de Venus y Adam, ¿de dónde procede?

    La historia de amor entre una joven extrovertida, simpática y sociable y un brillante chico que padece Síndrome de Asperger se le ocurrió a Max Mayer tras escuchar una noticia en la radio sobre el casi desconocido trastorno. El director y guionista de 'Adam' quería desarrollar su idea sobre un concepto inicial más amplio y ambiguo: la dificultad para entender la inescrutable forma de sentir de ese ser que amamos. El propio Mayer describe así su proceso de elaboración del concepto: "cuando escuché a ese hombre que hablaba en la radio del Síndrome de Asperger, me di cuenta de que no sólo estaba describiendo su propia y extremadamente emocionante odisea, sino que también se refería a algo acerca de la condición humana en general. Todos estamos atrapados en nuestras propias cabezas y sólo podemos tratar de adivinar la experiencia que otra persona tiene del mundo, incluida aquélla a la que amamos. Eso es lo que me inspiró para dar comienzo a 'Adam'. Cuando empecé a escribir, caí en la cuenta de que la relación entre Adam y Beth es una versión extrema de un dilema muy habitual al que todos nos enfrentamos en la vida: la necesidad de una relación íntima con algo que es forzosamente extraño: otra persona que tiene su propia idea del mundo".

    El Síndrome de Asperger: la ausencia de la "teoría de la mente"

    Para construir el personaje de 'Adam', Max Mayer tuvo que investigar sobre lo que se conoce de este síndrome. Según recientes estadísticas del Autism Society of America Fact Sheet, a 1 de cada 150 niños que nacen en Estados Unidos se le diagnosticará un trastorno perteneciente la familia del autismo. Los expertos no se ponen de acuerdo a la hora de explicar los motivos por los que esta patología resulta cada vez más habitual en los diagnósticos. El Síndrome de Asperger, patología que sufre el protagonista del film, está considerado una forma de autismo, pero se distingue del trastorno clásico en que las personas afectadas por Asperger cuentan con un domino lingüístico y un rendimiento cognitivo superiores. Dadas estas características de la personalidad de los "Aspis" (como así se autodenominan), han sido tradicionalmente considerados como personas simplemente excéntricas o "raras". Los indicios fundamentales del Asperger según el National Institute of Neurological Disorders and Stroke incluyen: obsesión o preocupación inhabitual por ciertos temas como horarios de trenes o estadísticas que implica la exclusión total de otras actividades; rutinas incuestionables por parte del paciente y una conducta socialmente inadecuada que se traduce en dificultad para interpretar lo que otras personas puedan pensar o sentir, falta de reciprocidad emocional y gestos inadecuados para la comunicación (como, por ejemplo, sostener la mirada de quien está enfrente de ellos). La gran laguna social de los pacientes de Asperger consiste en la ausencia de la llamada "teoría de la mente" (Mindblindness: An Essay on Autism de Simon Baron Cohen y Empathy, Mindblidness and Theory of Mind de Linda Soraya en "Psychology Today", mayo del 2008). La "teoría de la mente" es la aptitud innata en el ser humano de comprender que otras personas pueden tener uno sentimientos, pensamientos o deseos completamente diferentes de los propios. Además de que esta capacidad permite establecer relaciones cercanas con los otros, también es imprescindible para engañar y mentir. Precisamente por esta última característica, los "Aspis" tienen obstaculizada su intimidad y son, por consiguiente, molesta y poco ortodoxamente sinceros.

    "New York, I Love You"

    Residente en Nueva York desde hace muchos años, Max Mayer comenzó el guión de 'Adam' pensando en el clásico idilio en Manhattan sobre "chico conoce chica en un edificio". La ciudad adquiere un protagonismo especial en las imágenes del film. Para Mayer, lo más divertido de la realización de este proyecto fue la creación de dos atmósferas puramente neoyorquinas: una ciudad animada llena de oportunidades y proyectos que representara el espacio de Beth (Rose Byrne) y, por otra parte, la laberíntica y caótica metrópoli, acorde con Adam (Hugh Dancy). La pasión que el director siente por la ciudad de los rascacielos provoca que "ésta se convierta en un personaje más de la película".

    Del teatro al celuloide

    'Adam' supone la segunda incursión en el largometraje de Max Mayer, guionista y director del film, tras su ópera prima independiente 'Better Living', en la cual el ya difunto Roy Scheider, célebre jefe de policía Martin Brody en 'Tiburón', tiene un papel. Pero Mayer cuenta con un currículum nada denostable a sus espaldas: ha sido responsable de más de cincuenta montajes teatrales en todo el país, además de dirigir un episodio de 'El ala oeste de la Casa Blanca' (2005), otro de 'Alias' (2004) y varios de 'Leyes de familia' (1999-2002).

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