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29 usuarios
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4,0
Publicada el 16 de junio de 2010
Tierna, tierna, pero que muy tierna. Ese es el adjetivo que mejor le va a La última canción. Ahora que Miley Cirus quería desprenderse de su imagen de niña adorable, que arrastra debido al papel de la serie Hannah Montana poniéndose sin parar ropa estilo Madonna, aparece en esta película tan románticona, que la aleja un poco de ese personaje. Es que nos quiere dar una de cal y de una arena o es que no tiene definido lo que es ni siquiera lo que quiere ser, cosa de adolescentes, supongo. La película en sí misma no tiene nada de sorprendente, pero tiene bonitos paisajes y la actuación de los protagonistas es bastante aceptable, aunque tampoco extraordinaria. No es de las películas que marcarán una década pero, para un rato de dulzor sin pretensiones, puede servir.
La película es preciosa, y si no fuera así no hubiera estado toda la sala llorando por lo que transmitía la película. La gran actriz en la que se ha convertido Miley Cyrus actúa muy bien en la pelí0cula, y sobre todo la historia en sí es preciosa, la recomiendo a aquellas personas que sienten las películas de verdad. No recomendable a aquellas personas que están muertas por dentro. Como ya he dicho, la historia es superbonita. Los actores están increíbles (eso que pensaba que Hannah Montana no iba a dar mucho la talla de actriz, pero me equivoqué). La verdad es que en la peli se tocan varios aspectos, el amor que es el que todos sabemos y el familiar ya que no se da cuenta uno de lo que tiene hasta que lo pierde. Muy recomendable.
Película para fans de Miley. O en su defecto de sábado por la tarde en la tele repantingado en el sofá, pero no creo que nadie mayor de 20 años acuda motu proprio a verla al cine...
Pese a Miley Cyrus, que no es santa de mi devoción, una película preciosa. Lágrimones... si es que no lo puedo evitar, me encantan los dramas románticos.