Ariana vive con Eloísa, su madre adoptiva, en una comunidad brasileña habitada por descendientes de esclavos llamada Itamatatiua. Este documental sigue la vida del poblado durante tres años, insistiendo especialmente en el desarraigo infantil, que se materializa con el seguimiento de la relación entre Ariana y Eloísa.
También se reflexiona sobre la pérdida de la infancia en un país de contrastes marcados como Brasil. Vemos cómo el director, Iban Ayesta Aldanondo, se implica en el futuro de Ariana y la acompaña a la ciudad en busca de su madre biológica.
El resultado final es una obra muy personal que mezcla la observación con la ficción y la reconstrucción.