Crítica de SensaCine.com para Balada Triste De Trompeta: La melodía del caos

El director Álex de la Iglesia consiguió reunir buena parte de sus obsesiones particulares en una cinta explosiva que concentraba todo lo bueno y lo malo que siempre ha tenido su cine. Por un lado, capacidad de riesgo, inventiva visual, y buen ojo a la hora de saber extraer de la sociedad toda su miseria moral. Por otro, histrionismo y caos.

En 'Balada triste de trompeta' regresa a uno de sus temas recurrentes: el enfrentamiento entre las dos Españas a través de la figura de dos payasos de feria ambulante que lucharán hasta matarse por defender cada uno su parcela, por imponer su voluntad e impedir no quedar doblegados el uno ante el otro. Y todo eso, por una mujer. Pero lo importante es cómo De la Iglesia construye un mecanismo narrativo totalmente histérico, repleto de violencia, citas y autorreferencias, en el que los desheredados del sistema se convierten casi en antihéroes románticos. A pesar de que en conjunto resulta insatisfactoria, no se puede negar, que tiene algo.

A favor: Areces y De la Torre.

En contra: Carolina Bang.