Todos los perros van al cielo: Un cuento de navidad

La trama tiene como principales artífices a un grupo de cachorros residentes en el Flea Bite Café, quienes se muestran cada vez más ilusionados y esperanzados ante la posibilidad de poder disfrutar de unas agradables vacaciones navideñas todos juntos en familia. En el lugar se pueden contemplar una serie de envoltorios que deben preparar para satisfacer los deseos de los más pequeños de la casa, además de unos preciosos adornos típicos de la época en la que está reflejado el filme y de una cuantiosa ofrenda para Timmy, un perro entrañable que tiene que ser intervenido de urgencia.

Aun así, el espíritu de alegría y de solidaridad que reina en el ambiente quiere ser trastocado por Carface, un temible animal al que la Navidad no le trae más que malos recuerdos y tiene el objetivo de que todos los que conviven a su alrededor sientan exactamente lo mismo que él. Para ello, se ha encargado de reunir a un conjunto de compañeros bastante despiadados que pretenden llevar a cabo una táctica maléfica: acabar de una vez por todas con la prosperidad de la gente en las celebraciones navideñas.

Entonces aparecerán las figuras de Itchy y de Charlie, dos adorables personajes que recibirán la visita de un ser celestial para elaborar una estrategia que consiga detener las viles intenciones Carface y de sus secuaces. Su finalidad es lograr que la Navidad se festeje en todas las partes del mundo, además de convencer al antagonista para que cambie por completo su visión conforme al auténtico significado de estas fechas tan señaladas.