Encerrada

La historia comienza mostrando a un matrimonio que se ha visto en la obligación de cambiar su residencia, debido a que la mujer ha sido despedida del prestigioso puesto de trabajo que desempeñaba hasta ese momento. La nueva región a la que acaban de llegar es mucho más serena y agradable que su anterior hogar, si bien es cierto que el barrio en el que habían convivido a lo largo de muchos años les ha dejado innumerables y maravillosos recuerdos debido al poder adquisitivo del mismo.

Victoria y Michael se plantean con mucha tranquilidad la aventura que va a suponer para ellos el hecho de cambiar de aires y de amigos o compañeros, sobre todo teniendo en cuenta que hace mucho tiempo que no se han visto en la necesidad de entablar una relación de plena confianza con ningún individuo en concreto. La situación es a priori realmente idílica, aunque se empezará a torcer cuando la protagonista lleve a cabo un conjunto de averiguaciones acerca de su nuevo vecino. Ella piensa firmemente que el joven ha raptado a una muchacha para propasarse con ella física y verbalmente, por lo que tratará de convencer a su marido para que le ayude a impedir cualquier tipo de atrocidad antes de que sea demasiado tarde.