Kyle Peoples (Lukas Haas), es un joven treintañero que no está nada motivado con su actual vida. Trabaja como contable, pero siente celos de su propia amante porque tiene más éxito que él. Ni siquiera se siente a gusto con su propia familia porque no se siente lo suficientemente querido. Es entonces cuando, en una noche de fiesta, conoce a un nuevo grupo de amigos que lo llevarán por nuevos senderos de diversión.
Maia (Necar Zadegan) y Dusty (Blake Berris) se convierten en los nuevos colegas del protagonista. Son divertidos, tienen temas de conversación, y sienten afinidad con él. Sin embargo, también son adictos al cristal, y arrastran a Kyle con ellos. Poco a poco, el joven empieza a meterse en el callejón sin salida de las metanfetaminas hasta que llegua a un estado mental complicado. Las drogas...o su vida.
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