Los “Miami Sharks” han iniciado su descenso a los infiernos. El equipo de fútbol americano ha sufrido una serie de reveses y, para mantenerse en su posición, el entrenador, que está empezando a ser seriamente cuestionado, saca a jugar a un talentoso principiante. A través de este retrato de los entresijos del fútbol americano, el realizador hace balance de las neurosis de los estadounidenses.
La Crítica de SensaCine
3,0
Entretenida
Un domingo cualquiera
Domingos de fútbol americano
por Miguel Blanco
Oliver Stone ha dedicado casi la totalidad de su filmografía a tratar temas de la actualidad de los EEUU, tanto en lo referente a política interior (sus películas de presidentes 'J.F.K.', 'Nixon' y la reciente 'W.'), exterior ('Salvador', 'Platoon'), pero también temas menos concretos como la economía ('Wall Street') y, en general, la cultura de consumo que el país norteamericano ha exportado a todo el mundo.En esta sociedad de consumo de masas una parte fundamental se basa en la explotación de los eventos deportivos. Así que Stone, siempre en la brecha, hizo una película sobre el tema, 'Un domingo cualquiera'. Y Stone tiene muy claros sus objetivos: desnaturalizar el hecho deportivo cuando este se convierte en puro objeto consumible. Tejer toda una serie de relaciones que no se mueven más que por la explotación económica. En este sentido, el fútbol americano es el deporte que mejor casa
La Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL) no quiso colaborar con el director, ya que no estaba de acuerdo con el punto de vista (negativo) que se estaba dando sobre éste deporte.
Doble función
Oliver Stone, además de ser el director, también interpreta a un comentarista deportivo.
Menos tiempo
La versión internacional de la película tuvo 12 minutos menos que la versión exhibida en EEUU. Según el director Oliver Stone, el corte es para dar mayor fluidez a la película.