Crítica de SensaCine.com para Una rubia muy legal: Los ricos también ríen

Reese Witherspoon es una actriz que a lo largo de los años se ha labrado un personaje modelo, que ha repetido en muchas comedias románticas. Una mujer temperamental, independiente, con tendencia a enamorarse fácilmente, pero que siempre termina al borde de la ruptura. Por eso, se ha convertido en una actriz exitosa, porque el público sabe identificarla con el tipo de películas que quieren ver.

Una de las excepciones a esa regla (al margen de sus películas dramáticas) sería 'Una rubia muy legal', donde interpreta a una rubia frívola y pija que piensa que el mundo gira alrededor de ella hasta que su novio la deja, al considerarla demasiado superficial para sus ambiciones políticas. Derrumbada, ella decide matricularse en Harvard para demostrar que puede ser tan buena como cualquiera, al margen de su aspecto exterior.

Por lo tanto, estamos ante una película bastante caricaturesca en la que Witherspoon interpreta a un trasunto de Paris Hilton, modelitos rosa chillón y chihuahua incluido. Sin perder su identidad, la protagonista conseguirá triunfar en sus objetivos gracias a su particular sentido del esfuerzo y del trabajo, y la habitual creencia en los sueños. Es, por lo tanto, una película muy tópica a la que se le intenta dar un envoltorio diferente, aprovechando una determinada coyuntura. El resultado es un film para fanáticos de Witherspoon o de Paris Hilton.

A favor: Witherspoon en un papel atípico.

En contra: Que no hace gracia.