Jacques Laurent tocó la cima en el mundo del porno en las décadas 70 y 80. Este cineasta dirigió los films más premiados pero hace ya veinte años que abandonó su profesión. Ahora se ha divorciado de su mujer y está mucho más estropeado, sin ganas de vivir y viejo. No obstante, aprovecha una oportunidad para volver a rodar una de aquellas películas. La experiencia no será como antaño, pues, entre otras cosas, sus ideas chocan mucho con las de su productor, un hombre a quien le gusta mostrar el sexo siguiendo patrones detallados. Jacques no solo sufre en el trabajo, su vida personal también está llena de problemas. A su ex mujer se suma un hijo a quien apenas conoce pues fueron separados cuando éste descubrió la profesión del padre. Ahora, años más tarde, ambos recuperan la relación. El director de cine empieza entonces a recobrar la ilusión perdida y quiere volver a plasmar en la pantalla el idealismo del 68, además de formar un hogar propio.
Es una película del director Bertrand Bonello protagonizada por Jean-Pierre Léaud (Jacques), Jérémie Renier, Dominique Blanc y Catherine Mouchet.
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