Después de diez años, el antiguo líder de la banda criminal Bull (Neil Maskell) regresa para matar a todos los que una vez le traicionaron. Uno en particular encabeza la lista: Su jefe y suegro Norm (David Hayman), que ha tomado medidas extremas para separarle de su hijo Aiden (Henri Charles). Mientras busca a su hijo y da caza a sus viejos socios, se embarca en un viaje de amor y venganza de proporciones bíblicas. Movido por su ansia de venganza, descubre secretos del pasado que le llevan a creer que su mujer también está implicada en las oscuras maquinaciones que lo delataron.