El estado de las cosas

La trama está localizada en Portugal, concretamente en el rodaje de un largometraje que está llevando a cabo un grupo de filmación profesional. Su intención es elaborar una historia ficticia y alternativa que no se ha visto hasta ahora en la gran pantalla, teniendo como temática principal la destrucción generada por una catástrofe nuclear. Todo parece apuntar a que el proyecto terminará siendo un éxito, aunque las complicaciones aparecen justo en el preciso instante en el que el equipo se queda sin rollos para proseguir con la grabación de la película.

Con el objetivo de solucionar los inconvenientes a los que han tenido que hacer frente a lo largo del rodaje, el productor toma la decisión de marcharse del ambiente escogido para enmarcar la historia y se desplaza a Estados Unidos para conseguir el presupuesto necesario que permita terminar de rodar la obra cinematográfica. Pero los protagonistas que se han comprometido a que el trabajo salga adelante empiezan a impacientarse ante la ausencia del productor, por lo que creen que en realidad todo es una farsa y que no recibirán nada a cambio de participar en el filme.