Vaslav Nijinsky fue el más grande bailarín del siglo XX. Su carrera estuvo marcada por su éxito en el mundo del ballet y la tumultuosa relación homosexual que mantuvo con el empresario el Ballet Ruso Sergei Diaghilev a la vez que estaba casado con la bailarina Romola De Pulsky, un triángulo amoroso que le acabaría llevando a la locura.